Panamá secuestrada por delincuentes

Panamá sigue sufriendo, pues los malandros la tienen secuestrada. Libertad no hay, porque cuando cae la noche nadie puede pasear por el oloroso malecón a mierda en la avenida Balboa, si es que no quieres que un negro hijueputa 'pasa pasa' te robe tu asqueroso 'Black Berry'.

Panamá la sufrida, porque nos quitan de a poquito las ganas de respirar. Un día cuando despierte de tu cama con olor a mugrosidad, porque la mía huele a rosas, te darás cuenta que te estás asfixiando. Pero ya por respirar te aplican un gravamen.

Cuesta respirar, toda vez que tu comida sale cara y si dejas de comer, obvio que morirás de hambre. ¡Solución! Dijo un gran hombre por la década de los 40's, el ilustre Dr. Arnulfo Arias Madrid: 'a comer yuca con miel'.

Panamá la sufrida, mientras que en otras latitudes, se quejan ante la falta de una falsa libertad, una ilusoria libertad, que no es más que libertinaje, drogas y prostitución. Ah...pero ¿en qué país no existen las putitas alegres? Vayan a ver cómo la gente de Osama, digo, Obama, que se cree la policía del mundo, dice dónde hay putas y dónde no las hay, dónde están las feas y en dónde no las hay, quién se porta bien y quién no.