De forma desapercibida se dio a conocer el pasado 8 de abril la muerte en Las Vegas, Nevada, del especialista en armamento Morris 'Dick' Jeppson, a la edad de 87 años, poco meses antes del 65 aniversario del lanzamiento de la bomba atómica sobre Hirishima que él ayudó a lanzar.Jeppson sólo se limitó a decir: "cuando tienes un trabajo que hacer, simplemente lo haces".
Actualmente el único de los 12 tripulantes del Enola Gay que continúa con vida es el oficial de navegación Theodore 'Dutch' Van Kirk, quien tiene 89 años de edad.
Jeppson murió sin pena ni gloria. Su hazaña fue olvidada por conveniencia, pues, a EE.UU. el país de la supuesta 'Libertad', que todo gusano balsero admira, le cuesta mucho recordar aquél genocidio. (Estás en el lugar equivocado amigo..huye..!)
¡Pobre Jeppson!. ¿Ustedes creerían que San Pedro, o incluso el mismísimo Dios aceptará su excusa de que 'cuando tienes un trabajo que hacer, simplemente lo haces"? ¡Por Dios, ni que su trabajo se tratara de matar hormigas o envolver embutidos! El tipo mató en el momento a 140 mil personas y miles más como consecuencia de la radiación.
Sugiero que en su vida ha pasado más pesadumbres por las almas de esos japoneses, en su mayoría civiles, que murieron aquél 6 de agosto de 1945.
