Llegó la época de la cuaresma donde muchos católicos piensan que se irán al infierno si no comen pescado, pero todos sabemos que es una gran awebazón eso de comer marisco sobre todo los viernes dizque porque Papa Dios te va a mandar al fuego eterno, porque te metiste tu tremenda hamburguesa del Macdonal o Burguer King. Entonces vemos que en el Mercado de Marisco o en cualquier lugar que vendan los productos del mar, los comerciantes te suben el precio de estos alimentos por aquella menta'a tesis de la libre oferta y demanda. Claro si hay un montón de idiotas que piensan que se van al infierno si comen carne de vaca o de sapo, preferirán comer mariscos. Por esa razón te suben el precio de los mariscos. Yo como lo que me da la gana, ya que en la Biblia no dice nada de eso de que prohibido comer pescado. ¡Qué bobería caballero! Viernes Santos me haré un tremendo asado de puerco, no sé ustedes. Por otro lado hay un abuso con los precios del marisco. Miren, en estos días de paz y libertad me largué a una de esas playas del pacíficos que dicho sea de paso, los ricos no las andan quitando de a poquito, entonces nos encontramos con unos pescadores quienes directamente nos ofertaron sus productos por precios bajísimos. Estos peces que mostramos mi hermanito y yo que son Jurel, nos costaron 3 palitos cada uno. Un pez de casi 20 libras. Ya saben que lo demás es un asalto a mano armada, pues esos precios como la del pargo 2.50 la libra no me parece nada honesto y así a medida que llega el Viernes Santo, los comerciantes te subirán el precio por arriba de los 3 dólares. Eso es una tremenda bellaquería en este país donde la pobreza, la miseria, el hambre y la explotación campea.
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