La expiación es parte de nuestras funciones aquí en la tierra para purificar nuestro espíritu. Cada uno mientras hacemos lo que nos venga en ganas, al mismo tiempo debemos saber que no nos gobernamos solos.
Que dentro de nosotros mora un ser espirita que se sabe envuelto en un grosero cuerpo y mientras actuemos mal, es debido a que tenemos un ser espirita inferior, aferrado a las cosas mundanas y que goza cada vez que sale a flote las bajas pasiones, la soberbia y además todo aquello que implica maldad.
No nos podemos señalar como puros mientras persistan los males que aquejan a muchas personas. De hecho no hay ser humano puro, sino próximos a serlo, por ejemplo, el Papa Juan Pablo II fue el más cercano a la pureza. De hecho, su ser espirita lo guió y encaminó hacia donde está Dios. En su vida de madurez comprendió la tarea de la expiación. Su espíritu concretó su misión en esta tierra. Ahora es un ser superior.
Todos nosotros los humanos tenemos ese ser espirita. Cada uno con una misión específica. Y te preguntarás, entonces ¿por qué hay piedreros, gente desquiciadas o por qué alguién joven buena gente murió horriblemente en un accidente de tránsito?
Pues bien, trataré de responder: Cuando vemos a un piedrero no significa precisamente que hay un ser espirita inferior. Un piedrero no tiene baja pasiones, porque está enfermo, si sólo usa drogas y su mente, valga la redundancia, está dañada. Es un karma que alguien pudiera estar pagando. Su padre o madre tal vez, producto de alguna mala acción pasada.
El espíritu de ese señor está desesperado por abandonar esa envoltura grosera en que se haya el ser espirita atrapado. Ya aprendió y busca la manera de lo más prontamente posible desprenderse del cuerpo humano. O tal vez, es un chance que se te da para que le des una ayudita, ya sea vistiéndolo o alimentándolo. Generalmente no nos corresponderá atenderlo salvo excepciones especiales. Para eso están las organizaciones sociales.
Esta situación se da también para aquellas personas con discapacidad mental o que tengan algún tipo de impedimento.
Sin embargo, para aquellos buenos que murieron abruptamente, es porque quizás hay otra misión que debiera cumplir en otra parte del universo o en la tierra o en el peor de los casos, es parte del karma que alguien está recibiendo por una o diversas malas acciones. Miren a Mike Tayson, un hombre violento con muchas malas acciones. Tuvo que enfrentar el dolor verdadero con la pérdida de su hija de cuatro años. Y recuerden nuestra misión en la tierra es expiar nuestras almas. En otras palabras....pórtense bien mientras vivan y haz el bien y no mires a quién.