Desde la Cripta: El Vergajín satánico

'Soy el mejor, soy el prity, soy Papa Dios, nadie sabe mejor que yo sobre este negocio. Estoy rodeado de mediocres ¡Qué rabia!, así decía un hijo de puta en lo que creía era su finca.

'Oh' -exclamó el señor Vergajín - tengo que ir a la iglesia a adorar a mi Dios que hace que parezca menos loco, aunque por la iglesia que estoy, dicen que ando más ponchi y más porque aún quedan los recuerdos frescos de mi oscuro pasado. De lanzarme fallidamente en un puente para matarme por el amor de un cura, digo, mujer.

Exclamación del público: uuuuuuyy...pato...cuecón..!

Ante esas exclamaciones que salieron de la nada, como cosa de locos, el pobrecito de Vergajín manifestó de forma airada: ¡qué pato de qué...no respetan...soy un varón de Dios...Tus días están contados. Ya esto es insostenible....tienen una posición privilegiada por todas partes!.

La sacada de ñecks

Vergajín prefería masturbarse con un períodico con la portada de un muerto en vez de hacerle el amor a su mujer en casa. Recordemos que trabajaba en una finca donde se creía Rey, pero era un pobre enfermo mental, pues había intentado suicidarse, pero cayó de culo en un puente por allá en la tumba de un muerto, y lo hizo por amor, es algo que mueve a risa a todo el mundo que lo rodea.

Ah...era tan descuidado con su aspecto personal que su boca le hedía a vómito y por donde iba, la caspa le saltaba de su cabello de spring y se las pegaba a sus interlocutores. ¡Qué asco! Y conocía bien que su desdicha consistió en que no tuvo amigos, sino lambones, que también lo odiaban. Solo que andan lamboneando porque necesitaban del salario para poder llevar algo a su hogar.

Bienvenidos al mundo de la lambonería.

Un día al salir de su asqueroso trabajo nunca imaginó lo que le iba a pasar. El man subió a su carro. Era más allá de la media noche. Todo estaba oscuro. Antes de encender el vehículo hubo un estruendo en la capota del mismo y a la vez la punta de un pico quedó incrustado en el techo del carro que le volaron un montón de caspa de su cochina cabeza, como si fuera la nieve en tiempo de navidad.

Vergajín Vergajo abrió la puerta del vehículo y raudo trató de salir como gallina cuando la quiere pisar el Gallo, pero que va blood. La Suicida, digo el Suicida lo apañó un alambre de púas que le rodeo su cuello lleno de collares. Sí..., esos collares de suciedad que le salen a la gente porque no se baña.

Cierto ser de fuerza descomunal lo 'jala'. Vergajo se agarra de las cuerdas de púas en el cuello para no lastimarse más de la cuenta, pues comenzaba a sangrar el hijo de puta. Su verdugo lo lleva arrastrado velozmente hasta la calle principal y lo ata a su 4x4.

Vergajo grita: Nooooo.....por favor......tengo un bebé......por Dios no me maten. Señor mío protégeme, no le haré más daño a nadie lo juro por mi vidaaaaa....Noooooooo hohoho...buáaaa....buaaáaaa.....

Así lloraba la niña, digo el loco. Pero que va papá. El ser extraño arrancó en primera y lo arrastró por toda la calle principal. No había guardias, nadie pasó por la calle. No hubo testigos.

Macabro disfraz

En plena avenida con sus luces de maravillas y en un semáforo de esos que se dicen ser inteligentes, porque están graduados de la Universidad, varios carros se detienen porque la luz está en roja.

Los conductores andan eufóricos y alegres bebiendo cerveza y gritando: Sólido, cool....hey es un perro muerto que llevas atrás...Ta' original, ¿dónde es la party man?

Luz verde y la 4x4 sale disparado como alma que se lo lleva el Diablo y atado a él....un pedazo de alambre de púas con una masa cárnica que se asemeja al jarrete y a la filtrafa que venden en los súper con un montón de greñitas que iba soltando caspa por la avenida...Que pases un Felíz día de Halloween.